Anda corriendo un relato,
con cuidado y con afán,
en la población de "El Plato",
se volvió un hombre caimán.
Se va el caimán, se va el caimán,
se va para Barranquilla,
comiendo pan, comiendo pan,
untado con mantequilla.
Lo que come este caimán,
es digno de admiración,
come queso y come pan
y bebe tragos de ron.
Se va el caimán, se va el caimán,
se va para Barranquilla,
comiendo pan, comiendo pan,
untado con mantequilla.
Una vieja y un viejito,
se cayeron en un pozo
y la viejita decía,
¡ay!... qué pozo tan sabroso.
Se va el caimán, se va el caimán,
se va para Barranquilla,
comiendo pan, comiendo pan,
untado con mantequilla.
Tenha acesso a benefícios exclusivos no App e no Site
Chega de anúncios
Badges exclusivas
Mais recursos no app do Afinador
Atendimento Prioritário
Aumente seu limite de lista
Ajude a produzir mais conteúdo